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He llegado a navegar por mares y utopías de esas que amodorran y nublan la razón pero que acarician hasta el fondo último de la más remota fibra que podamos imaginar existiendo en nuestro adentro. (...) Retomando el tema de los Encuentros en el norte de mi México, me sorprendió su avidez por la poesía. (...)Parece que las nuevas generaciones están abriendo su mente, ojalá que llegue más luz hasta acá donde tanto falta....
(Extractos de sentimientos de su reciente gira poéticas por Silao y su amado León, entre otras que emprende constantemente, Joseph Berolo

MADRE ES

 mi madre Tierra
origen de orígenes
fuente de energía

Madre que pare con dolor
dolor que es conciencia
saber de responsabilidad
manjar de luces

Vivir en ella
con los hilos de la vida
del peso de la acción
de tus pensamientos

De tus deseos de búsqueda
de caminos y soluciones
en el aquí, ¡Madre!

VICTORIA ROMERO SILVA



Vientre de Tierra

 

Quiero ser 
como fuente 
de aguas 
claras y transparentes
Quiero ser 
un venero 
que mitigue 
los pesares
Un río poderoso 
quiero ser 
que fluya 
por mis torrentes 
y mitigar 
las sedes.
Vientre de tierra 
quiero ser 
y que me habiten 
los cuarzos 
para iluminar 
de energía
Como la naturaleza 
prodigiosa 
llena de vides 
que broten 
por mis sienes 
cual la mítica 
Medusa
quiero ser

Madreselva

 

Me propongo ser
como una Madreselva
Que conserva
siempre
sus perfumes
Floreciendo
cada día
todo el año
Ante el calor
del verano
avivando
sus aromas
Ante el hielo
del Enero
fuerte
apegada al muro
Mis raíces
serán tan profundas
que no las arrancará
una mano traicionera
Mucho menos
el olvido
y sus botones
florecidos
Permaneceré
ante las tempestades
con mis tallos
amarrados
Aferrados
al deshielo
de tus lágrimas
Y mi semilla
se esparcirá
en los picos
de las codornices
y mis pistilos
despiertos
aromáticos
y regios
Se reflejarán
en tus ojos

 

 

El Halcón Dorado

 

Conocí ayer un halcón casi desnudo,
lo divisé de muy lejos,
el grisáceo matiz de sus alas al abrir,
muy poderosamente
apenas alcancé a percibir.
Se le veía hastiado, harto ya de cumplir su oficio,
por estirpe natural, se distinguía cazando hermanos,
había cumplido demasiado bien su cruel tarea,
digamos que hasta la había disfrutado,
la rapiña se le daba natural, por linaje.
 
Cuando su cansado vuelo lo trajo más a mi vista,
le vi sus alas rotas, su agudo pico ensangrentado
su plumaje todo alborotado, con heces entreveradas,
su resuello cansado revelaba su asqueante faena.
 
Al posar su vuelo en aquella altísima veranda, extenuado,
notó sin sentir que en su frenético vuelo,
que al voltear su gallardo y altivo cuello,
el viento y el abandono lo habían llevado demasiado lejos.
 
Espantado su corazón se sobrecogió,
sus aterrados ojos se cuajaron en llanto,
perlas de desolación le hicieron sentir la soledad.
 
Emprendió de nuevo aquel torturante viaje,
 vagó entonces por inefables alturas,
bogó por ignotas playas,
cuánto y cómo, nunca supo,
pero al remontar su vuelo exhaló,
un llanto nuevo de su peregrino vuelo,
un sollozo extraviado y ya caduco,
y fue entonces que sintió renacer en sus adentros,
aquella ardiente ansia de volver.

Nació en él un sentimiento nuevo y desco
nocido,
de desafiar la vida en su constante reto,
debió aprovechar el lance de sus alas laceradas,
en su ya apremiante urgido regreso
 
La experiencia y la lejanía,
habíanlo marcado como hierro candente,
jamás volvería a ser el mismo.}

Sofocado, harto y cansado,
con la ruta totalmente perdida,
senda imposible de descifrar,
en aquél sórdido silencio,
le provocó volverse hacia sus adentros,
y en los efluvios de su candente interior,
escuchó una breve voz que lo llamaba,
era como un susurro divino que lo guiaba,
hacia un rumbo perdido y se dejó llevar.
 
De pronto vislumbró a lo lejos,
algunas aves de rapiña, como siempre, en lo suyo,
aves pasajeras otras, en sus ires y venires,
aves otras que viajaban al golpe del viento,
aves de primavera y de verano, dejándose llevar,
aves de paso otras, que no dejan huella,
aves de mal agüero presagiando tempestades,
y por demás, aves hermosas y esplendentes invitando,
a remontar un vuelo, lejos, mucho más alto,
como el ave fénix, que resurge de sus cenizas,
para fundirse en el horizonte con el fuego del sol.
 
Fragoroso palpitar invadió entonces su pecho,
al reunirse de nuevo con los suyos,
aquel rayo de luz que ahora como sello lo marcaba,
iluminaba todo el derredor con mágicos aromas,
anidaba en sus entrañas,
un algo que todo lo transformaba.  

 

Hoy desde mi alcanzar vi pasar
aquel hermoso halcón dorado,
sus alas despedían arcoiris de destellos,
luceros celestes que tamizaban el viento,
imprimiéndole aromas divinos al revolotear,
luces únicas, coloraciones magníficas,
que transparentaban su alma y su carne,l
henchidas de una nueva y mágica claridad.

 


Acepto la bienvenida que me brinda Joseph Berolo, como Miembro Fundador y agradezco su generosa invitación a tomar parte en el escenario de la Revista Virtual Ave Viajera Órgano de Comunicaciones de las Naciones Unidas de las Letras para difundir mi obra como misión de vida.Atesoro con gran honor esta dorada oportunidad que su mano abierta me ofrece para participar con mis líneas al lado de plumas tan excelsas  de renombre internacional que conforman las Naciones Unidas De Las Letras. Victoria Romero Silva 2011

Victoria Romero Silva

Estudió secretariado bilingüe en León, Gto. México, su ciudad natal y High School en el Incarnate Word de San Antonio Texas, enriqueciendo su preparación básica con diplomados en Historia del Arte Universal, Antropología y Arte Precolombinos y estudios de diversas filosofías y ciencias alternativas. Incursionó en la política en el Partido Verde Ecologista siendo presidenta del mismo en su estado en 1997 y fue presidenta de la ONG Acción Ecologista Independiente participando en Milenio Feminista. Publicó su primer libro de poesía en el 2003 intitulado \'\'Canto a la Mujer\'\', el cual presentó en el 6to. Encuentro Internacional de Mujeres Escritoras Inés Arredondo que se llevó a cabo en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, México, en Septiembre del 2004. Su poesía fue seleccionada para participar en la página web de la UNESCO dedicada a Pablo Neruda 2004. Actualmente trabaja en el proyecto de Fraccionamiento Habitacional Campestre La Misión. Y prepara la edición de su siguiente poemario e incursiona en la novela. 

LA PIEL CUBIERTA DE AZUCENAS

Invoco a las espigas para que sean el verano
a los frutos para que lluevan sobre mi corazón abierto
que sean las uvas el conjuro y la hierba
el musgo doblegando la espada
y la cigarra brille como el cuarzo
que no haya escombros
sólo siembras y damascos
que la escarcha del sol se repita
como se repite el mundo
y la noche sea la parábola
que desata la ortiga y su cabeza de hiena
que no haya azotes
ni crucificados
cubiertos por el alba.
No quiero ver la ceniza de los nísperos
sólo tu sangre y mi sangre
la claridad de las magnolias.
En la noche no quiero oír zumbar
el estupor
ni el hambre
sólo un blanco como de oro
descendiendo a las manos que amo.
No quiero el crujir de dientes del que extraña la luz
y siente miedo en las escaleras y los túneles
ni ver al tigre devorarse las dalias.
No profanaré la piel cubierta de lirios
de la mujer enferma
el gris de las aldabas
ni habrá pájaros ahogados en el pozo
no temblaré en el umbral
ni esconderé entre papiros y dagas
las escamas del pez
el búho ciego.
Un sabor a berenjenas
será la canción de los inviernos
escucharé al caracol en la roja orilla del agua
la música del roble en el abismo
las cometas oliendo a lluvia y a naranjos
las sonámbulas prometiéndome
acallar a los gatos que maúllan
mientras aman a sus hembras.
No clavaré alfileres a las mariposas
que danzan su minué frente al espejo
será bella la torre
la madera que se inventa los olores de tu cuerpo
la luna que desemboca en los almendros desnudos
No seré la de los dados y las sombras
no quemaré a las libélulas
mi rebaño de ovejas
no me tatuaré los parpados
amanecerá la ciudad sobre los insectos
haré de mis blasfemias una túnica llena de cilicios.
En este único y luminoso día
seré la fábula en el crepúsculo
el agua que gotea en el jardín de la clepsidra
naceré de nuevo
del viento y las revelaciones
seré la lumbre de mi canto.

Amparo Romero Vásquez
2012