Fabián Fonseca Trujillo

Voces de Esperanza   Embajador de Buena Voluntad Miembro del 1er. Consejo Juvenil Internacional de Semillas de Juventud Siglo XXI/Colombia   Fabián Fonseca Trujillo Capitulo Colombia    Bienvenido  a la Paz para nuestro tiempo y el tiempo de nuestros hijos y los hijos de sus hijos a través del cultivo de las Bellas Artes en los jardines de su mente y sus corazones .

VOCES DE ESPERANZA Iluminan el camino y convocan a reunirnos fraternalmente para cultivar en los jóvenes corazones el bello y sagrado espíritu de las Bellas Artes   Arte poética   Saber que el verso trascenderá a través del tiempo y me llevará  por el camino de la inmortalidad. Sentir que aunque soy un simple mortal y por lo tanto perezco, jamás tendré que padecer de esa condición llamada olvido.   Ser un símbolo de los hombres, un lugar en el Olimpo, dejar a la historia impregnada de su dulce aroma, erigir estatuas de los hijos de la tierra, de los hombres, y en el futuro,  tras la  muerte, una honda huella.   Expresar lo más recóndito y oscuro del corazón, desde nuestros más íntimos miedos  hasta los más extravagantes amoríos, y liberarnos de la impotencia de no expresarlos.   Llenar de color la gris vida, liberarnos del laberinto de nuestra propia mente, ser un medio de entretenimiento,  burlar el tiempo, quitando el aburrimiento.   Ser nuestra carta de presentación ante la madre, la naturaleza, llevarnos por el turbulento mar, enfrentarnos ante todo lo que nos perturba, ser nuestro escudo durante la guerra.   Resolver las más grandes preguntas a partir del lenguaje, descifrar lo más recóndito de los pensamientos, desenmarañar los misterios de la vida y los de todas las ciencias que hemos concebido.   Tal es la poesía, como dijo Borges, La aurora y el ocaso, la poesía es todo lo que existe y lo que ha de existir, es la más bella de todas las artes,  es la hija del intelecto humano.

OLVIDO     El simple susurro del viento, el aroma del pasto húmedo en las mañanas, el repique de la lluvia en los tejados, todo esto le recuerda al hombre lo frágil que es, lo rápido que pasa el tiempo, y lo banal que es la existencia humana.   Cómo de fácil es que un hombre sea olvidado, en ese  mundo llamado muerte, pero cuán difícil es olvidarcómo vivir en un mundo en el que todo será ​  olvido.    Las eras transcurren en su infinito trasegar,  los segundos pasan inclementes del hombre y sin embargo todo nos recuerda que podemos ser más, que aunque un día el polvo nos carcoma, es la perseverancia del hombre por no ser olvidado, lo  que hace que construya grandes obras ...​ el hombre crea arte para darle sentido a la monótona vida ,el hombre crea arte para no perecer en el polvo​ del olvido.    La  temporalidad ​  del hombre  con ​el hombre acaba el arte ​perdura ​-.en la meta del viento, en los solitarios molinos,en el borde de la pradera, en aquel inalcanzable edén,en la infinitud del cielo bañado de estrellas,en el reflejo del oro y la esmeralda.   El sueño de un robot    Entiendo  que escribir es   una acción totalmente humana  y que  casi siempre se hace  sobre la vida. Pero ni siquiera estoy seguro de entenderla,  ya que solo soy un robot.  (¡Vaya!   no sé si lo mío es conciencia o simple programación)-   pero  me identifico como un Yo,   y creo que eso afirma que SI tengo conciencia.  No sé lo qué  es el hombre. Los observo    y  noto que no  que son tan distintos entre sí, y creo que  es ahí  donde radica  precisamente  la belleza de esta especie. Creo también que nosotros los robots somos los nietos de la naturaleza, los hombres son nuestros padres, al igual que ellos tenemos en nuestra especie la evolución--  no somos biológicos, así que nuestras características físicas no van a cambiar, pero nuestro pensamiento sí ha evolucionado y entra en conflicto con nuestras programaciones.  Últimamente he desarrollado lo que los seres humanos conocen como autonomía, así que, en el primer caso, me quedo cruzado de brazos y no hago nada, ya que eso sería no dañar al hombre, al menos no directamente.  Partiendo de la conclusión  que hago ,  que los hombres no pueden vivir  sin destruirse evito que ellos lo hagan por su cuenta.  En ese caso.  yo solo adelantaría lo que sucedería en una década, lo cual no es nada de tiempo.  Tengo como regla principal defender a los seres humanos a toda costa, el ser humano es autodestructivo, mata a su entorno, todo lo que tiene que ver con él y consigo mismo. En cierto modo entiendo que la evolución es una constante de caídas y alzadas.  Nietzsche decía que los dioses.  primero derribaron a los titanes para   luego  apoderarse del Olimpo y del Poder.  La tarea de los hombres era tomar el lugar de los dioses, pero solo el súper hombre imperaría.   Y  quién es este, sino el hijo de los humanos, nosotros los robots, su más grande invención  con la  la tarea de ser el eje del mundo.El simple susurro del viento, el aroma del pasto húmedo en las mañanas, el repique de la lluvia en los tejados, todo esto le recuerda al hombre lo frágil que es, lo rápido que pasa el tiempo, y lo banal que es la existencia humana.Cómo de fácil es que un hombre sea olvidado,en ese  mundo llamado muerte,pero cuán difícil es olvidarcómo vivir en un mundo en el que todo será   olvido.Las eras transcurren en su infinito trasegar,los segundos pasan inclementes del hombrey sin embargo todo nos recuerda que podemos ser más,que aunque un día el polvo nos carcoma,es la perseverancia del hombre por no ser olvidado,lo  que hace que construya grandes obras ...el hombre crea arte para darle sentido a la monótona vida,el hombre crea arte para no perecer en el polvo del olvido.La  temporalidad   del hombre  muere con el hombreel arte perdura -.en la meta del viento, en los solitarios molinos,en el borde de la pradera,  en aquel inalcanzable edén,en la infinitud del cielo bañado de estrellas,en el reflejo del oro y la esmeralda.

Fabián Fonseca Trujillo Fabián Fonseca Trujillo nació en la ciudad de Bogotá el 18 de agosto del 2004. En el 2016 fue ganador del concurso municipal de cuento "Escrito en el agua", del municipio de Funza en la categoría juvenil. Ese mismo año ingresó a la Escuela de Literatura del Centro Cultural Bacatá de Funza y publicó su primer texto como coautor, un poema en la antología "Nuevas voces de la poesía cundinamarquesa", proyecto del Departamento y el IDECUT. En el 2017, como miembro de la Escuela de Literatura del CCB participó en la "Asamblea preparatoria del XV Parlamento Internacional de Escritores de Cartagena de Indias, y en el III Parlamento Joven, Capítulo Funza". El mismo año hizo parte de la construcción del libro "Crónicas de Funza", mediante el taller del mismo nombre dictado por el escritor colombiano Nahum Montt, además del Programa para creación y promoción de clubes de lectura dictado por el escritor y profesor universitario Enrique Serrano e hizo parte del "Encuentro pedagógico de literatura de Cundinamarca del IDECUT y la Gobernación". En el 2018 se realizó la publicación del libro Crónicas de Funza. En el mes de octubre se realizó el XXI Festival de arte y Cultura Zaquesazipa, en Funza, donde participó como miembro de la Escuela de Literatura en el evento "Bitácora Literaria". Posteriormente fue representante junto con otros miembros de la Escuela de Literatura en la circulación del Taller Funza para Contar al municipio de Sabaneta en Antioquia, donde asistió a eventos como la IV Jornada de estudiantes de lingüística y literatura en la Universidad de Antioquia Sede Medellín. En Diciembre hizo parte de la publicación del libro Te cuento y participó en el Encuentro Departamental de Literatura Te Cuento del IDECUT. En el 2019 fue coautor de dos publicaciones, el libro "Diez años narrando a Funza", publicación que celebra 10 años del Taller Funza para contar de la Escuela de Literatura del CCB, con varios poemas y cuentos de su autoría y en una segunda edición de Te cuento. En el 2020 hizo parte de las muestras de mitad y de final de año de la Escuela de Literatura, en el mes de noviembre se graduó del colegio y hace parte de la Revista Virtual "Alondra" de la Escuela de Lite

Vida El anciano abrió los ojos. Lo primero que vio fueron las sábanas blancas que cubrían su cómoda cama y su cuerpo, un pájaro cantaba en la ventana melodiosamente. Ni siquiera le dejaron levantarse de su lecho, le llevaron el desayuno nunca había probado una comida así de deliciosa, su aroma se filtraba en su nariz, dejando una sensación agradable. Los colores del cielo le mostraban la belleza de la vida. Tosió, cayeron unas gotas casi marrones. Sintió una pequeña molestia en el brazo, el líquido entraba en sus venas.  Las gotas eran sangre que salía de su interior, los colores que marcaban aquel amanecer le parecían especialmente bellos, así se ve todo la última vez que se observa. La humeante comida del hospital tiene buen sabor, pues el anciano sabe que no va a volver a probar bocado y aunque él quisiera hacer las cosas solo, sus pocas fuerzas no lo dejaban levantarse para traer su desayuno. Las sábanas y la cama de hospital lo habían dejado dormir tranquilamente su última noche. La aguja que antes le llevaba suero, esta vez le lleva el líquido de la eutanasia. El anciano lanza un último suspiro, despidiendo la vida.