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En busca de PazOfelia Anzil ¡OH! ¡Qué espanto! Cuánto dolor provoca la incomprensión, la intolerancia... Fusiles, bombas, metrallas... disparan directamente al corazón de la Paz. Tristeza, desconcierto, preguntas sin respuestas...¿Por
qué? ¿Hasta cuándo? El dolor aumenta segundo a segundo. La muerte cubre, con su lúgubre manto, los cuerpos cegados por
la guerra. El lamento se torna río de sangre. La Paz llora sin consuelo; pide, clama, ruega que detengan la barbarie. ¡OH! ¡Qué espanto! Y yo aquí,
en este suelo austral del planeta, mientras el corazón late desgarrado y la impotencia me estremece, sólo atino a elevar una plegaria implorando
por la PAZ. ¡Por piedad, callen las armas!
ES UNA VENTURA Y UNA GRACIA PODER LEER Y SENSIBILIZARME CON ESTE MANANTIAL DE VERSOS. LA PAZ ANHELADA
POR MUCHOS DE LOS NUESTROS, ABRE CAMINO A GRITOS. GRACIAS GRAN LÍDER JOSEPH BEROLO POR MOTIVARNOS EN ESTA
CRUZADA.
ARCO IRIS DE PAZ
Desde lejos anhelo contemplar la
aurora bañada de rocíos el aire, el sol en el alar, aquellos tesoros tuyos y los míos.
Asomada de nuevo a mi ventana presagio la magia de los versos, las nubes van en caravana persiguiendo
felices nuestros sueños.
alcanzo a divisar hermosa imagen en arreboles simples y colores, el arco iris
funde en el paisaje una paloma blanca y muchas flores.
Arco de amor iris sopla el viento, paz
entrega al universo éste, complejo mundo no lo comprendo.
Ma. Adiela Londoño de Copete Vicepresidente
Adjunto Naciones Unidas de las Letras Cartago
Valle
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¡ HOY, DESDE LAPIZ MÁGICO
LES PIDO HONRAR LA VIDA! La mayoría de las personas, al crecer, olvidan lo lindo y divertido que es ser niños. Se olvidan de
esa pureza característica de los más pequeños, se olvidan de esa falta de odio y ambición. Quizás, si el mundo fuera niño todo sería distinto. No habría hambre ni pobreza, no habría tristeza ni dolor... Pero como los grandes no pueden
volver a ser niños hoy les pido que se sientan como tales, que vuelvan a cantar y reír sin razón, que
vuelvan a jugar un juego sin la idea de ganar algo, que vuelvan a tener ideas locas y si tienen que gritar que sea de alegría
no de enojo. Hoy les pido esto por la simple
razón que, si vuelven a sentirse niños y lo recuerdan, lo primero que sientan al despertar sea felicidad. (Laura Ximena Proyecto "LÁPIZ MÁGICO" Córdoba Argentina)
PROYECTO: "LÁPIZ
MÁGICO" Directora: Ofelia
Anzil UNILETRAS Argentina ofedvanzil@gmail.com OBJETIVOS *Despertar interés por
la Literatura. *Goce por la producción literaria. *Concientizar a niños y adolescentes que por medio de la Literatura podemos transmitir valores y aportes a la Paz. *Sumar
voluntades para que "Semillas de Juventud" siga creciendo. ACTIVIDADES *Invitar a niños y adolescentes a participar del proyecto. *No
necesariamente deben concurrir a un Centro Educativo en particular. podrán
integrar el Semillero todos aquellos que muestren interés por la expresión literaria y deseen sumarse. *Preparar fichas con datos personales de cada integrante con la correspondiente autorización de sus responsables. *Se establecerán redes entre escritores (Semillas) de distintas localidades. *Seguimiento personalizado, motivación, orientación en las actividades literarias *Intercambio de ideas y comentarios entre los alumnos, comunicación en forma presencial y/o virtual, rondas de lectura, títeres, narraciones, dramatizaciones... *Corrección y selección de producciones para exponer en una página
integradora donde puedan participar en
forma grupal. *Buscar apoyo de diversas instituciones
con el fin de realizar y concurrir a eventos en
distintos lugares y colaborar con "Semillas de Juventud".
Directora:
Ofelia Anzil UNILETRAS
Argentina ofedvanzil@gmail.com
¿QUÉ
ES PAZ? Vivir en un lugar tranquilo rodeado
de Naturaleza, eso es Paz. Ivonne
Veliz
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PARA MI LA PAZ ES Ser bueno,jugar, compartir
con la familia, estar limpios, sentir que quiero y me quieren. Gianella Trinidad 2do Grado- Niv. Inicial
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La Poesía es su cuna.... |
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Laura Ximena Antoniazzi Albert. Semillas de Juventud Int´l |
PAZ
ES Amar a todos, que todos en mi familia estén bien, no pelear. Luisiana
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LA PAZ La Paz para mí
significa dos personas que quieren lo mismo y no tienen que buscar la pelea sino el diálogo y
compartir con los demás. En la guerra entre los pueblos algún día, ellos, deberían comprender, a todos quererlos como son y que nos acepten, a todos, como somos. Rogamos todos para que se resuelva
el problema y por los niños porque ellos no hicieron nada malo.
Rocío 4to Grado - Nivel Primario
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SENDA DE PAZ
Si por un instante no pensáramos sólo en nosotros, si extendiéramos
nuestra mano para levantar al caído, si saludáramos con una sonrisa
al vecino, si le agradeciéramos a Dios la alegría de cada
niño, si recordáramos que no somos de hierro y dejáramos derretir el hielo
de nuestra mirada, si recobráramos el valor de la Palabra ENCONTRARÍAMOS
LA PAZ.
Belén Albert Estudiante de Profesorado
de Nivel Primario
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LA PAZ La Paz para mí significa dos personas que quieren lo mismo y no tienen que buscar
la pelea sino el diálogo y compartir con los demás. En la guerra entre los pueblos algún día,
ellos, deberían comprender, a todos quererlos como son y que nos acepten, a todos, como somos. Rogamos
todos para que se resuelva el problema y por los niños porque ellos no hicieron nada malo. Rocío
4to Grado - Nivel Primario
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BIENAVENTURADOSSon las bendiciones
de Jesús, que hoy día resuenan fuertes como sonido de campanas, y penetran como flechas en la armadura de la
historia; Aquella parte que se hace fuerte para no dejar penetrar los dardos de las voces que se alzan en clamor, por aquellos
rostros perdidos de nuestra patria y del mundo entero. Bienaventurados. Bienaventurados hoy día, aquellos hombres y mujeres que cargando con un niño
en brazos y arrastrando más que con sus enseres, arrastran toda una amarga tragicomedia que mata el alma, por culpa
de aquellos que roban los sueños y matan las ganas de echar raíces en un suelo paterno, obligándolos
como "perros moribundos" a refugiarse donde no sólo sentirán algunas veces "alegría"
por estar alejados de una u otra manera de la guerra, sino que también sentirán la nostalgia de no estar en
sus tierras preñadas de ilusiones y de haber perdido un lugar en el mundo. Bienaventurados aquellos jóvenes y niños que por culpa
de la guerra, llámese como se quiera llamar, se ven obligados a vagar sin sentido en medio de una jungla de odio y
miseria que solo les ofrece la muerte lenta y su más alto grado de amistad corrupta reflejada en las drogas y en cada
mala pasada que les juegue la vida. Bienaventuradas aquellas familias y por tanto sus hijas e hijos privados del más alto don que Dios misericordioso
nos ha regalado, esa libertad que se expresa en el amor fraterno y la búsqueda de la felicidad común, un alto
rango que no se consigue a la vuelta de la esquina, ni muchos menos pagando con el dinero del egoísmo.Una que nos fue
regalada desde nuestro primer aliento de vida, pero que aquellos nuestros propios hermanos la manchan con la cobardía
estúpida de no saber ofrecer amor genuino y por eso dejarse manchar con la sangre del rencor humano; aunque no sea
este último fermento de misericordia cristiana. Bienaventurados aquellos hijos e hijas de nuestros pueblos que sufren en carne propia
el vaivén de los fusiles y día y noche se ven obligados a escuchar el repugnante sonido del fuego a quema ropa;
ese que desangra al instante y calcina hasta el último nervio humano al ser abrazado por la muerte, y bienaventurado
aquel que se ve envestido por la injusta hostilidad, por caminar en su suelo de encantos y ser por "desgracia" solo
un hombre civil que paga los platos rotos de lo absurdo y lo inimaginable. Bienaventurados todos aquellos que aun habiendo pasado más de un tiempo llámese
"considerable" siguen escuchando desde los metros bajo tierra las voces melancólicas de sus madres y parientes,
que a una sola voz expresan con su llanto la furia ante una sociedad que deja impune el asesinato de sus hijos amados y olvidados,
y por la maldad sin corazón de aquellos "también" hijos, que borran a sus propios hermanos de un territorio
que sin reparos a todos cobija con su manto maternal. Bienaventurados aquellas y aquellos niños y niñas que aun sin conocer el mundo cálido
y otras tantas veces efímero, la luz que acapara la eternidad temporal y la brisa que rosa el rostro humano, no han
conocido más que el vientre maternal que además de ser refugio natural y divino para fabricar amor, también
lo convierten en, y no es que sea máquina de destrucción masiva que acaba con la semilla de una nueva flor que
viene destinada para embellecer el jardín de Dios y bienaventurados todas y todos los que por alguna u otra causa,
se hayan visto enlutados por la sangre que corre por nuestros campos verdes de América, del mundo, y que han sido olvidados,
por el hecho de no ser rostros con nombres excelsos y vidas de epopeya. Bienaventurados aquellos que trabajan por la paz y se donan día a día para
transformar nuestra historia.
VINCULO A URL ,
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HONRAR LA VIDA Elías Galati Es indudable que la vida es el primer valor, y el sustento necesario de
cualquier pensamiento, idea o actividad humana. Sin
vida nada hay. A pesar de ello, en
muchísimas circunstancias se encuentra desvalorizada, oprimida y hasta desahuciada. Pero el encono más feroz que el propio hombre tiene con la vida
es la guerra. Una contienda fraticida, que tiene motivos indignantes para una correcta evaluación del ser del hombre
y de la dignidad de la vida.El poder, la
conquista territorial, la fama, los bienes materiales, la opresión, el triunfalismo de las ideologías, la venganza,
el odio o el rencor, el desprecio por el otro, por lo que siente, por lo que es o por lo que piensa, son consideraciones que
se ponen en primer lugar en una contienda, antes de la honra de la vida y de la existencia.Siempre
son culpables los enemigos, por lo general de un lado y del otro, con los mismos motivos y las mismas condiciones. En las grandes guerras, se dio la paradoja, que de un bando como del otro,
se luchaba protegidos por la misma fe, y orando al mismo Dios. ¿Cuándo aprenderá el hombre a refrenas sus impulsos y proceder racionalmente? Pareciera que nunca. He señalado en otros ensayos que la vida tiene dos valores fundamentales si uno
quiere vivirla con dignidad, uno es el amor y otro es la paz. Ambos son complementarios y opuestos totalmente a la guerra. No es posible entender una concepción bélica dentro de este esquema
de dignidad de la vida.Hay numerosas situaciones,
circunstancias muy plausibles y aún comprensibles que hacen a veces encender un fervor ya sea patriótico,
de justicia o de equilibrio, y también extenderlo a una situación de violencia, como si fuera imposible la racionalidad
para solucionar los conflictos que le plantea la existencia al hombre. Sucedió con las guerras de la independencia, con las guerras mundiales donde había
una necesidad de cambiar un status perverso y denigrante de algunos seres considerados como minoría, pero en última
instancia la guerra es un instrumento de violencia, y puesto en relación y contrapuesto con el hombre, no hay alternativa
en la elección. ¿Qué
es más importante que el hombre? Se podrá decir que la dignidad, la libertad, el pleno derecho de las ideas
y pensamientos, pero es evidente y no se puede discutir ni dudar, que todas esas virtudes y características elementales
del ser, no tendrían ningún sentido si no existe la vida.Porque la vida es el primer valor, el fundamental, el basal, y se debe preservar, proteger
y promover, ella como la cultura de la vida. En algunos sectores y en algunos momentos hay tal desvalorización que se habla
de una cultura de la muerte, y de una pauperización de la cotización de la vida. Se dice a menudo, la vida no vale nada,
y aunque sea una realidad, es una realidad que no debe compenetrarse en nosotros, y a la que nos debemos oponer con todas
nuestras fuerzas. ¿Cómo se honra la vida? Primero con nuestras ideas y nuestros pensamientos, que son los que generan los ideales y las acciones.Sostener una mente limpia y capaz de
separar la pasión, la soberbia, la egolatría y la superioridad del verdadero equilibrio de las relaciones humanas. Amar la paz, que significa amar al hombre,
a todos los hombres, amar la verdad, amar la belleza, amar la justicia, amar la solidaridad y pregonar y proyectar en los
otros ese amor. Luego
con nuestras acciones, que en realidad se sometan a ese pensamiento y a ese ideal de paz y amor que debe proceder de nuestro
interior. Fundamentalmente
en las situaciones reales, las de todos los días, las pequeñas cosas, que van generando un modelo de comportamiento
y de respuesta a las mismas. En cada ocasión en la cual por enojo, ira, rencor, o por apresuramiento en evaluar la situación,
se aparece ante nosotros la violencia y pretendemos que es la solución a ese pequeño o gran conflicto atravesado,
sin darnos cuenta que nos vamos formando un círculo de desamor, de desencuentro y de desarmonía con nuestros
hermanos. Seamos
heraldos y misioneros de la paz, en el sentido que sea nuestra misión en la vida honrarla, dignificarla y hacerla armónica
y placentera para todos. Elías D. Galati
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