Naciones Unidas de las Letra&Semillas de Juventud

Acepto la bienvenida que me brinda Joseph Berolo, como Miembro Fundador y agradezco su generosa invitación a tomar parte en el escenario de la Revista Virtual Ave Viajera Órgano de Comunicaciones de las Naciones Unidas de las Letras para difundir mi obra como misión de vida.Atesoro con gran honor esta dorada oportunidad que su mano abierta me ofrece para participar con mis líneas al lado de plumas tan excelsas como las de su co- fundador Dr. Ernesto Kahan y demás poetas de renombre internacional de la lengua castellana que conforman las Naciones Unidas De Las Letras. Victoria Romero Silva

He llegado a navegar por mares y utopías de esas que amodorran y nublan la razón pero que acarician hasta el fondo último de la más remota fibra que podamos imaginar existiendo en nuestro adentro. (...) Retomando el tema de los Encuentros en el norte de mi México, me sorprendió su avidez por la poesía. (...)Parece que las nuevas generaciones están abriendo su mente, ojalá que llegue más luz hasta acá donde tanto falta....
(Extractos de sentimientos de su reciente gira poéticas por Silao y su amado León, entre otras que emprende constantemente, El Edtor

MADRE ES

 mi madre Tierra
origen de orígenes
fuente de energía

Madre que pare con dolor
dolor que es conciencia
saber de responsabilidad
manjar de luces

Vivir en ella
con los hilos de la vida
del peso de la acción
de tus pensamientos

De tus deseos de búsqueda
de caminos y soluciones
en el aquí, ¡Madre!

VICTORIA ROMERO SILVA

Junio 20, 2011

 


LA PIEL CUBIERTA DE AZUCENAS

Invoco a las espigas para que sean el verano
a los frutos para que lluevan sobre mi corazón abierto
que sean las uvas el conjuro y la hierba
el musgo doblegando la espada
y la cigarra brille como el cuarzo
que no haya escombros
sólo siembras y damascos
que la escarcha del sol se repita
como se repite el mundo
y la noche sea la parábola
que desata la ortiga y su cabeza de hiena
que no haya azotes
ni crucificados
cubiertos por el alba.
No quiero ver la ceniza de los nísperos
sólo tu sangre y mi sangre
la claridad de las magnolias.
En la noche no quiero oír zumbar
el estupor
ni el hambre
sólo un blanco como de oro
descendiendo a las manos que amo.
No quiero el crujir de dientes del que extraña la luz
y siente miedo en las escaleras y los túneles
ni ver al tigre devorarse las dalias.
No profanaré la piel cubierta de lirios
de la mujer enferma
el gris de las aldabas
ni habrá pájaros ahogados en el pozo
no temblaré en el umbral
ni esconderé entre papiros y dagas
las escamas del pez
el búho ciego.
Un sabor a berenjenas
será la canción de los inviernos
escucharé al caracol en la roja orilla del agua
la música del roble en el abismo
las cometas oliendo a lluvia y a naranjos
las sonámbulas prometiéndome
acallar a los gatos que maúllan
mientras aman a sus hembras.
No clavaré alfileres a las mariposas
que danzan su minué frente al espejo
será bella la torre
la madera que se inventa los olores de tu cuerpo
la luna que desemboca en los almendros desnudos
No seré la de los dados y las sombras
no quemaré a las libélulas
mi rebaño de ovejas
no me tatuaré los parpados
amanecerá la ciudad sobre los insectos
haré de mis blasfemias una túnica llena de cilicios.
En este único y luminoso día
seré la fábula en el crepúsculo
el agua que gotea en el jardín de la clepsidra
naceré de nuevo
del viento y las revelaciones
seré la lumbre de mi canto.

Amparo Romero Vásquez
2012