CONCIERTO DE LA ALBORADA 2015AFILIACIONNações Unidas das Letras

¡ELIDA!

Al devenir de cuna Isabelina
como hijato connivente del azar,
Isácar me tomó dudoso a cargo
para mi humeante cerebro descarnar.

Recién nacida me llevó a su tribu
quiso con descaro evitar la muerte,
me miró de hito en hito y quedó...
sellada mi promisoria suerte.

Al verse preludiar mi adolescencia
de linfálida, con mirada gélida,
surgió la poligrafía de los sueños
y con fuego grabó mi nombre ¡Elida!

quiso con descaro evitar la muerte,
me miró de hito en hito y quedó...
sellada mi promisoria suerte.

Al verse preludiar mi adolescencia
de linfálida, con mirada gélida,
surgió la poligrafía de los sueños
y con fuego grabó mi nombre ¡Elida!


El salitral

No hay árboles pájaros ni agua,
no es pampa, médanos ni arenales,
solo salitre que brota festoneando
el húmedo contorno de las calles.

Esta tierra reseca y blanquecina
donde habita el esqueleto sepultado,
de sencillos moradores del espacio
que legaron sus cuerpos dislocados.

El sol reverbera y encandila
acosa la espera del resignado jume,
mezquina sombra de predio triste,
careciente de color y de perfume

Solo el latido de esta valiente tierra
prosternada para orar a lo imposible,
bajo un cielo doloroso y terco
se enseñorea de resistir lo terrible.

Quizá guarda una historia el salitral aislado,
quizá fue mar furioso que replegó sus aguas...
o quizá un gran ejército de valientes,
que sepultó su cuerpo inerte y mutilado.

email,eldavali@yahoo.com.ar

Elida Seferina Vallejo http://blogsdelagente.com/elrelojdearena/



¡Eso es poesía!

Admirar el cielo estrellado
descubrir el diáfano día
hollar la arena mojada,

¡Eso es poesía!

Pedirle al mar su bravura
a la sierra su gallardía
a la vida extender sus tiempos,

¡Eso es poesía!

Sentir un cálido abrazo
un beso placentero en la mejilla
la risa de los niños en la plaza,

¡Eso es poesía

Acunar la madre a su hijo
posarlo el padre en sus rodillas,
contemplar el éxtasis en sus ojos,

¡Eso es poesía!

Armar el pájaro su nido
perlar la flor el rocío
colmar el alma de dicha,


¡Eso es poesía!

Elida Vallejo- San Luis- Argentina


OBJETIVO: Lograr la Paz en el Mundo a través de las letras

De elida-vallejo
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ELIDA VALLEJO NACIÓ EN EL PEDERNAL, DEPARTAMENTO BELGRANO, SAN LUIS, ARGENTINA EL 4 DE JUNIO DE 1932. ABRAZÓ LA POESÍA DESDE LA PRIMERA INFANCIA Y AUNQUE NO FUE DOCENTE TITULADA CONSAGRÓ SU VIDA A LOS NIÑOS. ESCRIBIÓ POESÍAS Y CUENTOS PERMITIÉNDOLE EN ESTE MOMENTO DESARROLLAR SU PASIÓN. HA TENIDO UNA DESTACADA PARTICIPACIÓN EN CERTÁMENES Y ENCUENTROS LITERARIOS Y ESTÁ PRÓXIMA A PUBLICAR SU PRIMER LIBRO.

Y surgió la poligrafía de los sueños,
y con fuego grabó mi nombre ¡Elida!

PAZ
Multifacético concepto de la vida.
Eres: Palabra.
Silencio.
Bandera.
Paloma.
Vuelas en el eco de todas las campanas.

Eres: Mensaje.
Promesa.
Presencia.
Poema.

Permaneces intangible en los rumores.
Eres: Muchedumbre.
Soledad.
Sollozo.
Risa.

Dominas con tu magia inexpugnable.
Eres: Esperanza.
Refugio.
Alma.
Amor.

¡Oh! Paz soñada, añorada!
¡Bendice los espíritus, que te proclaman!
¡Sempiterna Soberana de felicidad!
Elida Vallejo - San Luis -Argentina

 

Elida Vallejo Nació en el Pedernal Dpto. Belgrano. San Luis-Argentina el 4 de junio de 1932. Amante de la lectura y del beneficio de la educación, su obra literaria recorre desde lo social a lo personal.Además de poesías, también escribe cuentos infantiles, leídos en programas radiales locales y de España además deser publicados en revistas y otros espacios digitales. Malvinas Argentinas y El Salitral obtuvieron: Mención de Honor en su Provincia y el Primer Premio en Buenos Aires 2009. Hoy está abocada a la¨presentación de su libro Poesía Viajera realizado en co-autoría con su Hija Iris Cadelago y preparando su próximo libro de cuentos infantiles. Participa en Congresos y encuentros literarios en diferentes puntos del país.

Reloj De Arena

Mide el arcano la longura de los tiempos
que la vida desliza por quiméricas pendientes
intangible sucesión de momentos imparables
prendidos a la eternidad, en monotonía creciente.

Mientras los días cabecean en el hueco de arena
se apretujan grano a grano en el reloj paciente
van colmando el barril de las centurias
desafiando el futuro, señalando el presente.