UNA  PENA MUY PERSONAL

A Felipe Camiroaga

 Perteneciendo a la Institución Naciones Unidas de Las Letras entiendo que además de mi nacionalidad chilena debo disfrutar la amistad de poetas y escritores de otras partes del orbe, y es así, que entre amigos se deben compartir las penas y alegrías.----Una de las metas que veo de continuo en los escritos que me llegan en mails de parte de mis nuevos amigos es la búsqueda de la paz mundial, es la hermandad en todo lo bueno que puede aportarnos la naturaleza si somos respetuosos de sus preceptos. Todo esto se basa en el concepto de estar vivos, de que se nos haya prestado el entorno que debemos de cuidar para que las nuevas generaciones tengan la posibilidad de ser felices.
Sin embargo, en mi patria, ahora hay pesar y me es imposible escribir con bondad si alguien no me ayuda a entender por qué algunos seres queridos son arrebatados de este mundo de maneras tan irracionales que ya no basta declarar que son los designios de Dios.
Confieso que en mi adolescencia fui muy miedoso y al instante de fallecer mi esposa hace muchos años me llené de valentía en rebeldía a la forma en que un accidente me la arrebató, y perdí el temor a Dios porque la vida dejó de importarme y encontré injusto vivir en el mundo para adorar a algo o alguien que tiene planes tan desconocidos para los seres humanos.
Ahora, en mi patria, un nuevo dolor nos embarga, al sufrir un accidente un avión que llevaba a 21 compatriotas, un accidente tan inexplicable que tal vez hubiera sido solucionable si los pasajeros hubieran entendido que su viaje era peligroso y no una placentera gira. Me lo contaron en la tarde cuando estaba en mi trabajo y lo tomé como se escuchan otras notas periodísticas.¨Pero intenté saber más, por mi humana condición que necesitaba negar la muerte de gentes tan conocidas.

Es difícil explicar las vibras que intenté entregarles
desde las lógicas lejanías que separan nuestras vidas,
pero sentí sensaciones extrañas al sentir como morían
de una forma espantosa que ellos no merecían.

En momentos creí que estaba junto a ellos en el avión,
conversando cosas vanas de esas que están en la vida.
Pero en un instante iracundo los vi que desaparecían
dejando un vacío inmenso que se tragó hasta su voz.

Cuerpos humanos de amigos se fueron a la deriva
mientras las aguas del mar en sus fauces los movían
para dejarnos las dudas de porqué eso sucedía
si en el principio del viaje disfrutaban la alegría

Yo no conocí a todos, y en verdad, tal vez ninguno
si defino que eran gentes del mundo televisivo
que en mañanas penetraban al trasfondo de mi casa
mientras yo me levantaba preparando mi salida.

Así un rostro dibujo, símbolo de todos ellos,
y a Felipe Camiroaga le envío saludos sinceros
porque sin haber querido me dejó la gran verdad
de que el valor de la vida es sentir la amistad

Ha obtenido varios premios en Concursos Literarios, incluyendo "Génesis" de Unquillo, Córdoba, Argentina.- Concurso Literario SALAC, premiado en Cuento y Poesía, Concurso "Cincuentenario de Universidad Católica de Valparaíso", Chile; Concurso "Empresas Laborales", Talcahuano, Chile; y muchos otros.--Autor de obra "Historia de La Calera" y 3 novelas Ciencia Ficción ("Creo en Dios"), Política Ficción ("El Presidente no ha muerto") y Farándula Ficción (" Millas 69").--Compositor, preseleccionado en seis ocasiones en Festival del Huaso de Olmué; una vez en Festival de la Vendimia, de Molina, y Festival de la Uva y el Durazno, de Los Andes.Participante de Antología Literaria "Quillota...en los senderos del Tiempo"

Nombre: Antonio Carvajal Sánchez
Nacionalidad: Chilena
Fecha nacimiento: 23 Octubre 1944
Domicilio: Avda. Valparaíso 285, Quillota, V Región.
Teléfono: 33-260194